de todo lo que pasa,
me dolería la cabeza.
No sé qué es preferible,
si darse cuenta o no.
Cuando me hago la pregunta,
ya es demasiado tarde,
como el final de la infancia,
como el primer vaso roto,
que no sabes por qué te arde
su caída,
su estallido,
cuando nace lo de antes
y después ya nunca es lo mismo.